Vistas de página en total

sábado, 30 de abril de 2011

SALMO EN BUSCA DE UN PROYECTO DE VIDA

Es el momento, Señor, de orientar mi vida;  es la hora de darle un rumbo a mi existencia;
estoy dispuesto a descubrir un nuevo camino; no me sirve, Señor, el vivir en una eterna encrucijada.

Estoy ante ti, abierto como la playa al mar; estoy en busca de tus pasos, de tus huellas;
quiero dejar atrás mis caminos y entrar por “tus caminos”, quiero decir si al plan de Dios para los sueños de mi vida.

Aquí estoy, Señor, como Saulo en el camino de Damasco; y te digo sin rodeos Señor, ¿que quieres que haga?.

Aquí estoy, Señor, como Samuel en la noche y te digo: Habla, que tu siervo escucha.
Aquí estoy, Señor, como María cuando era joven y te digo: He aquí tu esclava, que se haga según tu Palabra.
Aquí estoy. Señor con un corazón disponible como el tuyo y te digo: “Quiero hacer tu voluntad”.
Señor ¿que quieres de mi? ¿Qué me pides?
Señor, ¿cual es el plan del Padre para mi vida?
Señor, ¿cual es el proyecto que quieres que realice?
Señor, ¿a que me llamas? ¿por donde quieres que camine?
Señor, ¿cómo esta seguro de tus caminos en mi vida?
Señor, ¿cómo se lo que es eso lo que deseas de mi y no otra cosa?
Señor, ¿cómo ser fiel a la llamada que me haces?
Señor, ¿y si me equivoco y tengo que volver atrás?
Señor, ¿cómo como comprometerme si no estoy plenamente seguro?

Preguntas, Señor, siempre preguntas. ¿Cómo saldré de la duda?
Yo quiero tener claro cada paso del camino.
Soy calculador, Señor, y no me gusta arriesgar nada.
Yo quiero tener mis seguridades y tengo miedo a lo imprevisible.
Yo quiero dar respuesta, pero desde una fe razonada.
¿A fin de Cuentas, te busco o me busco, Señor? ¿Pongo los ojos en ti o me miro a mí?
¿Son tus intereses los que busco o los míos? ¿Estoy disponible ante ti?

Quiero, Señor Jesús, salir de esta confusión en que vivo.
Quiero, Señor Jesús, escucharte y dar respuesta a tu llamada.
Quiero, Señor Jesús, dejarlo todo, quedarme libre para seguirte.
Quiero, Señor Jesús, arriesgar mi camino con el tuyo,
Quiero, Señor Jesús, dejar mis miedos, dar paso a mi fe de joven.
Quiero, Señor Jesús, fiarme de tu plan porque me amas.

Yo sé que me has  mirado, que has puesto tus ojos en mí.
Yo sé que me quieres para ser servidor de tu Reino.
Yo sé que me das la fuerza de tu Espíritu para ser enviado.
Yo sé que es posible realizar tu plan y ser feliz
Señor, quiero hacer de tu Persona y tu Evangelio
el proyecto de mi vida, que dé sentido a mi existencia.
Aquí me tienes, Señor, para hacer tu voluntad.

LA IMPORTANCIA DE LOS VALORES.wmv